La Comisión Accidental de la Juventud de la Cámara de Representantes, coordinada por los Congresistas Alejandro García Ríos y Jennifer Pedraza, radicó el proyecto de ley ‘Reforma Joven’, una iniciativa que busca modificar el Estatuto de Ciudadanía Juvenil, con el objetivo de promover la participación e incidencia de las y los jóvenes colombianos en los escenarios políticos y sociales del país. Este movimiento marca un hito en la historia de la lucha de esta población porque se garanticen sus derechos.
La propuesta de reforma es el resultado de un proceso inclusivo y colaborativo que involucró a jóvenes de gran parte del territorio nacional, en el que se recogieron más de 300 propuestas que recopilan las necesidades y aspiraciones de la juventud colombiana. Este esfuerzo ha sido respaldado por los 36 congresistas que integran la Comisión Accidental de Juventud, Senadores de distintos partidos políticos, la Unión Europea en Colombia, la Agencia Italiana de Cooperación para el Desarrollo, el Instituto Holandés para la Democracia Multipartidaria, Civix Colombia, Pnud, Extituto de Política Abierta, plataformas de juventud y consejeros nacionales y municipales.
El Estatuto de Ciudadanía Juvenil, establecido inicialmente por la Ley 1622 de 2013 y modificado por la Ley Estatutaria 1885 de 2018, necesita adaptarse a las nuevas realidades y desafíos que enfrenta la juventud. Por esta razón, la ‘Reforma Joven’ aborda problemas críticos como la seguridad en los territorios, la falta de garantías para la participación ciudadana y la baja incidencia en políticas públicas. Estos cambios buscan fortalecer la democracia participativa y garantizar que las voces juveniles sean escuchadas y valoradas para la toma de decisiones y en la construcción de un país más inclusivo y democrático.
“La radicación de este proyecto de ley no solamente busca fortalecer la participación juvenil, dándoles garantías adicionales y reconociendo otras formas de participación para los jóvenes, sino que atiende la agenda que nos propusimos hace dos años con ellos, en la que identificamos algunos temas a trabajar y entre los que se encuentran la atención en salud mental, la educación rural y este de participación política juvenil. Con esta iniciativa se les da fuerza a los más de 11.000 jóvenes que están en los Concejos Municipales de Juventud y en las plataformas juveniles de todo el país, un proyecto que, por supuesto se puede mejorar, pero que debe dar sus cuatro debates en el Congreso de la República antes del 20 de junio de 2024. El tiempo corre y acá queremos responderle a la juventud”, señaló el representante Alejandro García.
Confió en que la radicación de esta reforma sea solo el comienzo de un debate amplio y participativo en el Congreso, donde la juventud tenga un papel protagónico y partícipe en todo el proceso. Se seguirán teniendo espacios amplios de diálogo en todo el país, incluyendo escenarios de participación convocados por la juventud y audiencias públicas, por lo cual se invita a la juventud organizada y no organizada a participar de los mismos. Este proyecto es esencial para asegurar que las políticas públicas reflejen verdaderamente las necesidades y aspiraciones de las juventudes colombianas, puntualizó.