La Ley Estatutaria de Educación debe ser aprobada sin afectar su espíritu original

Facebook
WhatsApp
Email
Telegram

En el Senado de la República se están discutiendo, en sus últimos dos debates, los detalles finales de la Ley Estatutaria de Educación. Este proyecto, en su concepción inicial, busca establecer y organizar un sistema educativo equitativo, inclusivo y de calidad, construido sobre décadas de lucha por un sistema digno, alejado de los modelos neoliberales y mercantilistas que se han intentado imponer, señala Santiago Osorio Marín Representante a la Cámara del Partido Alianza Verde.

“Como ponente de esta ley, llevamos al Congreso una propuesta que reconocía la educación como un derecho fundamental, recogiendo el espíritu de las luchas históricas de múltiples actores del sector educativo. Sin embargo, el “Frankenstein” que ha surgido de la Comisión Primera del Senado, donde se ha modificado cerca del 30% del articulado, ha desvirtuado la esencia y el propósito original de la ley”, dice el parlamentario caldense.

Desde nuestra curul, el mensaje es claro: el Gobierno en su ánimo conciliatorio debe garantizar la modificación de estos artículos lesivos, o lamentablemente, la ley debe hundirse. Hacemos un llamado a las bancadas afines al Gobierno para que analicen si existen las mayorías necesarias para revertir estos cambios dañinos y devolverle a la ley su espíritu inicial, pide Osorio Marín.

Explica que “Respetamos la posición de la Federación Colombiana de Educadores, Fecode e invitamos al diálogo entre el Gobierno Nacional y esta organización, quienes señalan las siguientes preocupaciones:

  • Enfoque Mixto y Privatización: La apertura de la educación al mercado bajo el pretexto de mejorar la calidad.
  • Evaluación Docente: Transformación punitiva de la evaluación, influenciada por múltiples factores externos.
  • Función Social de la Educación: Debilitamiento de la función social y enfoque en competencias.
  • Acceso a la Educación Superior: Imposición de la meritocracia como criterio principal.
  • Nivel Educativo Terciario: Creación sin suficiente debate con la comunidad educativa.
  • Grados de Transición: Negación del carácter obligatorio, afectando la calidad en instituciones públicas”.

Enfatiza en que “No podemos perder esta oportunidad histórica para Colombia. El Congreso de la República debe escuchar a todos los actores del sistema educativo, garantizar una educación que verdaderamente sea un derecho fundamental y trabajar hacia un consenso que permita avanzar con esta reforma crucial”.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *