El Departamento de Ciencias Básicas para la Salud de la Universidad de Caldas realiza hoy viernes 26 de abril, en el auditorio principal del Centro Cultural Universitario Rogelio Salmona, el Simposio de Nutrición y Cáncer, que estará dirigido a profesionales de la salud y público en general interesado en conocer la actualidad y los avances en torno a una enfermedad con aumento a gran escala de casos prevalentes en el mundo.
Aunque el cáncer es multifactorial, se sabe que una buena alimentación, incluso desde la etapa prenatal y en los ciclos posteriores de la vida, es fundamental para evitar el desarrollo de varias enfermedades, entre ellas, diversos tipos de cáncer. Atacando los factores de riesgo con una sana alimentación, se pueden prevenir patologías asociadas, precisamente, al consumo de cigarrillo, grasas saturadas y otros, que afectan el peso, la salud cardiovascular o los niveles de azúcar en sangre.
“La dieta también es un coadyuvante en el tratamiento de las personas con cáncer, pues ayuda a mitigar los efectos secundarios en estos tratamientos que son tan agresivos, como la quimioterapia y la radioterapia. En ese contexto, siempre será mejor tener un paciente bien nutrido y fortalecido inmunológicamente, que una persona con déficit nutricional”, afirma la profesora titular del Departamento de Ciencias Básicas para la Salud y médica nutrióloga de esta misma Facultad, Clara Helena González Correa.
¿Qué debo comer?
El campo de la nutrición evoluciona rápidamente, así como las asociaciones epidemiológicas y estadísticas. Por ello, muchos profesionales en este campo específico de la salud no alcanzan a registrar la última información. De ahí que uno de los propósitos del simposio es actualizar y retroalimentar a partir de las últimas evidencias científicas.
“Hoy en día se están estudiando esos componentes bioactivos en vegetales, frutas y otros alimentos naturales, para analizar sus efectos anticancerígenos, antiinflamatorios y antioxidantes tan importantes no solo para prevenir, sino para disminuir los efectos colaterales de los tratamientos oncológicos”, agrega González Correa.