El Gobierno de Caldas, a través de su Secretaría de Infraestructura y en compañía de la Alcaldía de Manzanares, tomó medidas de atención inmediatas en cuanto se registró ayer un derrumbe que afectó la vía veredal Manzanares – Las Margaritas, en el sector de Llanadas. Un suceso que, por fortuna, no se saldó con pérdidas humanas ni lesionados.
El gobernador de Caldas, Henry Gutiérrez Ángel, entabló comunicación permanente con los organismos de socorro y el alcalde de Manzanares, Carlos Enrique Botero, para poner a disposición todos los medios y soluciones como parte de la atención a esta eventualidad.
Una vez se presentó el hecho, a través de la Secretaría de Medio Ambiente de Caldas y Gestión del Riesgo del Departamento se emprendieron acciones con el fin de proteger a las familias que habitan en inmediaciones al derrumbe. Dos viviendas resultaron afectadas, una de las cuales debió ser evacuada.
De igual forma, los esfuerzos se enfocan en evitar el represamiento del río Santo Domingo, en donde se depositó material del deslizamiento. Por ello, se abrió una zanja con maquinaria de la Gobernación y la Alcaldía de Manzanares para que el agua siga su curso, un procedimiento que fue exitoso. “Este material rocoso nos está generando una obstrucción de la dinámica del cauce del río, situación que estamos atendiendo con la maquinaria del Departamento y el Municipio”, explicó Cristian Arroyave, secretario de Infraestructura de Caldas.
Ningún corregimiento de Manzanares está incomunicado. Sí se alargaron los ingresos a las veredas Cantadelicia, El Bosque, La Aradia, Naranjal, Buenos Aires, Santo Domingo y Las Margaritas. Hay acceso a través de la vía Las Margaritas – Las Mercedes – Las Palomas – La Italia, que sale a Dosquebradas y Santa Bárbara.
La vía municipal de Manzanares, que conecta a la localidad con Petaqueros, permanece habilitada y opera con normalidad.
Carlos Enrique Botero, alcalde de Manzanares, expresó: “gracias al señor gobernador, a todo el equipo del Departamento, que ha estado muy pendiente. La Gobernación pondrá a disposición una retroexcavadora para drenar el río. El riesgo sigue latente, pues es una ladera muy pronunciada y que está fisurada en la parte superior”.
Diana Raquel González, comandante del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Manzanares, hizo un llamado a vigilar el comportamiento del río: “a nuestros habitantes de la zona pedimos estar atentos al agua: qué tanta baja. Si ven que disminuye el caudal y para el fluido, por favor dar aviso inmediato a los organismos de socorro con el fin de tomar acciones”.